Como les contábamos en este artículo CÓMO ELEGIR FOTÓGRAFO, existen varias alternativas en lo que respecta a los estilos de fotografía de bodas y casamientos. Nosotros nos especializamos en Fotoperiodismo de Bodas (o Fotografía Documental de Casamientos), pero antes intentaremos hacer una descripción de las distintas opciones que existen; al menos las más habituales y conocidas.
Contenidos
Estilo de fotografía “clásica” o “tradicional”
Como su nombre lo indica, se refiere a las fotos tal como las tenemos (o teníamos) en nuestro imaginario colectivo: hace algunos años, cuando no era tan popular y accesible la fotografía digital; los (valientes!) fotógrafos hacían todo su registro en film. Por supuesto esto impactaba en muchos aspectos y diferencias técnicas, pero fundamentalmente en la cantidad de fotos que se tomaban durante los eventos.
Hoy en día los fotógrafos de bodas podemos tomar miles de fotografías, y si bien eso trae otras complicaciones diferentes, ya no tenemos el problema de estar limitados en cuanto a la cantidad de fotos que podemos tomar.
Si bien hoy parece algo totalmente inviable, en su momento esta limitación técnica obligaba al fotógrafo a asegurar y cuidar cada toma. El resultado es el que ya conocemos: fotos que están técnicamente súper cuidadas, con exposiciones perfectas a fuerza de flashes, y personas mirando a cámara rigurosamente.
Hoy en día, con los beneficios y el cambio de paradigma que implicó la llegada de la fotografía digital, fue mutando el estilo y esta propuesta tan “clásica” fue quedando un poco en desuso, pero aún hoy sigue habiendo algunos colegas / estudios que siguen en esa línea; sobre todo aquellos que vienen de aquella vieja escuela.
Estilo de fotografía “lifestile” o “editorial”
Se trata de una propuesta un poco más aggiornada, que tiene bastante de la fotografía clásica en el sentido de que se mantiene una idea general de fotos posadas, pero con el plus de una estética general muy cuidada en todas las escenas. Las llamadas “fotos tipo revista”.
Este estilo de fotos de alguna manera nos viene a traer la impronta de la fotografía de moda al mundo de los sociales.
Normalmente en este tipo de reportajes se le da mucha importancia a los detalles (outfit de los fotografiados, accesorios, etc.) como así también se suele utilizar iluminación de apoyo, para lograr esa estética similar a la fotografía de estudio.
Estilo Fotoperiodismo de Bodas
Hay un montón de cosas para decir acerca de esta propuesta, y -nobleza obliga- lo primero para aclarar es que este término no es para nada literal. El fotoperiodismo o documentalismo en general es una rama de la fotografía muy rica y llena de enormes fotógrafos y fotógrafas. Esto provoca que el término quede algo pretencioso, pero hasta el momento no apareció una definición que funcione mejor y deje contentos a todos.
Se trata en principio de hacer un reportaje con una mirada documental donde se van registrando los momentos de forma natural y espontánea sin intervenir las escenas.
Hablando en criollo: cuando un fotoperiodista va a cubrir -supongamos- una manifestación pública, una marcha, o cualquier acontecimiento, no tiene la posibilidad de estar “acomodando” lo que ocurre, ni hacer una puesta en escena de los personajes, sus poses, etc. Entonces el “fotoperiodista de bodas”, tiene como misión “imitar” esas condiciones de trabajo.
Volviendo al mundo de los casamientos y eventos en general, la gran diferencia (y complicación) del fotoperiodista de bodas respecto a los otros estilos, es su pericia a la hora de capturar lo que sucede como un testigo invisible, limitándose a fotografiar las cosas que pasan, y que pasarían de igual forma si él o ella no estuviera ahí. Y sobre todo su capacidad de anticipación a lo que probablemente ocurra para estar en el momento y lugar indicados para poder “cazar el momento”.
¿El resultado?, ¡Hermoso! Nuestra experiencia nos dice (y nos muestra) cada fin de semana que las personas salen infinitamente mejor en las fotos cuando no se dan cuenta que están siendo fotografiadas. Por otro lado, lo que se ve en las fotos son momentos genuinos que remiten inmediatamente a las emociones que se vivieron en cada momento. En tiempos de Instagram, donde la mayoría de las fotos que vemos son armadas y posadas, las fotos que salen de un registro con una mirada documentalista de bodas saltan a la vista inmediatamente por su frescura y sinceridad.
Hay un montón de bibliografía (muy interesante por cierto 🤓) que habla acerca de la “realidad” (o no) que puede transmitir o comunicar la fotografía. No es el objeto de este post hilar tan fino, pero conceptualmente nos parece súper interesante la idea de registrar escenas reales que se van dando naturalmente.
Más allá de todo esto, nosotros creemos tener un estilo que, si bien es en gran parte fotoperiodístico, toma también algunos rasgos de la fotografía clásica (leer más adelante “¿Y qué pasa con las fotos de pareja y las clásicas fotos de familia?) y algunos toques de la fotografía lifestyle de bodas, por ejemplo cuando hacemos las fotos de pareja y los retratos de la novia y el novio ya listos para salir a la ceremonia.
Las devoluciones que tenemos de las parejas que hemos fotografiado son realmente asombrosas en ese sentido: “hay fotos hermosas que no me di cuenta cuando fueron tomadas” o “no puedo creer que pudieron capturar este momento” o “estuvieron en todos lados pero ni los vimos”; son todas respuestas que hemos recibido y seguimos recibiendo habitualmente, y no podrían ponernos más contentos 😊
¿Por qué contratar a un fotógrafo especializado en fotoperiodismo de bodas?
El mayor diferencial que tendrá el este tipo de registro es el de retratar momentos reales y espontáneos más allá del de “salir bien en la foto”.
Por definición, el fotoperiodista se supone que debería estar preparado para hacer fotos en cualquier situación. Esto presenta una gran ventaja sobre todo técnica respecto de los otros estilos, ya que generalmente los eventos duran muchas horas, en las cuales hay cambios drásticos en cuanto a los tipos de escenas (previas en hoteles o casas, luego ceremonias en distintos lugares y sobre todo recepción y fiesta en situaciones de luz muy diferentes y complejas); entonces es aquí donde el fotoperiodismo se lleva las de ganar, al tener la capacidad de resolver cada situación de la mejor manera en cuestión de segundos.
Igualmente siempre recomendamos ver mucho material del fotógrafo o fotógrafa que estés considerando contratar para tu casamiento, para asegurarte de que su estilo esté alineado con lo que estás buscando y tus expectativas.
Lamentablemente hay muchos fotógrafos que tienen un discurso en el que prometen un reportaje fotoperiodístico, pero que no tiene nada que ver con el material que efectivamente producen… es por eso que sugerimos enfáticamente que te tomes el tiempo necesario para estudiar bien la propuesta de cada colega… pues en un casamiento no hay chances de segundas tomas! Armamos un artículo con tips y recomendaciones para elegir a tu fotógrafo ideal, en el que desarrollamos un poco más sobre este tema.
¿Y qué pasa con las fotos de la pareja y las clásicas fotos de familia?
Es la pregunta que más nos hacen! POR SUPUESTO que tiene que haber fotos de la pareja y fotos de familia!
En nuestro caso en particular, el estilo natural y espontáneo es el eje central sobre el cual construir el reportaje; pero justamente, pensando el registro del casamiento desde una perspectiva documental, nos parece importantísimo tener esos clásicos retratos de familia, prolijos, bien iluminados, con todas las personas mirando a cámara, como en las fotos de antaño.
La realidad es que tener estas fotos no solo que no va en “desmedro” del estilo fotoperiodístico, sino que por el contrario, son un complemento perfecto. Nosotros siempre intentamos coordinarlas previamente para hacerlas lo más rápido posible y liberar a los novios y a la familia para que luego disfruten del resto de la fiesta, junto con todos los invitados! 🙂
¿Qué pasa con el tema de la iluminación en el Fotoperiodismo de Bodas?
Siguiendo la misma idea de captar “la esencia” de cada momento y las personas que lo protagonizan, parte de la idea del fotoperiodismo de bodas es tratar de capturar los ambientes tal cual están. Sin luces que interfieran las escenas y los momentos que se van sucediendo.
Una de las premisas que llevamos adelante es pensar el resultado fotográfico a larguísimo plazo. Nuestra idea es que cuando cada familia vea esas fotos (y videos!) dentro de varios años, sean las disparadoras del recuerdo que los transporte al momento mismo en que sucedió todo; que sean un reflejo lo más fiel posible de lo que se vivió y SE SINTIÓ ese día.
Por supuesto que igualmente siempre tenemos nuestras luces de apoyo porque no siempre es técnicamente posible registrar todos los espacios tal cual están. Pero intentamos que cuando las usamos, sea de una forma creativa y sobre todo que no resulten invasivas, sino que solamente complementen el clima real de cada lugar y situación.
¿Y qué pasa con los videos? ¿Hay documentales de casamientos?
Pero claro que si! De hecho, pensándolo bien, es en el video de bodas donde mejor se puede representar el estilo documental!
Todas las premisas y técnicas que se utilizan en las fotos, también aplican para hacer videos documentales de bodas: evitar las poses forzadas, no intervenir las escenas con luces externas, respetar el clima de cada momento y sobre todo, registrar todo como meros testigos de los eventos conforman el prácticamente único “guion” que llevamos a cada uno de los eventos que nos toca registrar. El gran diferencial que tienen los videos documentales de casamiento por sobre las fotos es el componente del audio. En el videdo documental podemos registrar las palabras de los novios como también de los oradores durante la ceremonia, un elemento dindamental del documentalismo.
El resultado de esto son imágenes muy frescas, naturales, y que reflejan de la forma más fiel todo lo que ocurrió ese día.
Ya demás del registro documental de la fiesta en sí misma, lo bueno que se pueden hacer videos (más!) documentales, que cuenten la historia de la pareja, o de la familia, o de lo que sea! En este video de ejemplo, armamos con un estilo documental clásico (con entrevistas y todo!) un recorrido por la historia de Ceci y Juan, y mirá que lindo quedó!
Algunas consideraciones finales sobre el Fotoperiodismo de Bodas
Ningún estilo es “mejor” o “peor” por sí mismo. Cada una de las opciones tiene sus características propias y ninguna está bien o mal. Se trata de buscar el tipo de fotografía con el que te sientas más identificada/o.
Hay personas que se ven mejor reflejadas en imágenes que se parecen más a las que podríamos ver en una revista, y eso está perfecto!
Hay parejas con una mirada más “clásica” que priorizan tener las fotos tradicionales y asegurarse, por ejemplo, tener una foto con cada invitado a la fiesta; incluso siguiendo el famoso ritual de “la foto mesa por mesa”. Por supuesto que eso está muy bien también!
El fotoperiodismo de casamientos, no es ni por asomo un estilo que esté “en contra de” cualquier otra propuesta estética o visual. Por el contrario, creemos que llegó para darle una bocanada de aire fresco a la mirada de los eventos sociales.
En general suelen “gustar más” de este estilo documental aquellas parejas que buscan organizar Casamientos Alternativos, con toques diferentes, etc., pero como comentábamos más arriba, nada hay de mal con los estilos más tradicionales, tanto de fiestas, como de estilos de fotografía. Lo verdaderamente importante y nuestro consejo / comentario final es que, conociendo esta información, puedas ver, pensar y evaluar cuál es el estilo que más te representa, y SOBRE TODO, puedas navegar y considerar todas las opciones que encuentres hasta poder dar con el estilo y con el equipo que más cumpla con tus expectativas.
Como comentábamos antes, es importante que puedas verificar el portfolio de cada fotógrafo y evaluar vos misma/o que tan alineadas están las imágenes con su propuesta de valor y con tus gustos personales.
¡Hay fotógrafos para todos los gustos, por suerte!
